Significado de James

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¿Cuál es el origen del nombre James?
Significado de James:

¿Cuál es el origen del nombre James?

James es un nombre masculino de origen hebreo (Yaakov).

Significado de James:

James es la traducción anglosajona del hebreo Jacob o Yaakov. Posteriormente derivó a Iacobus en latín. El significado del nombre James es: “Dios recompensará”.

Características personales:

Los rasgos que más definen a James son su sociabilidad, entusiasmo y energía. James es un hombre abierto, alegre, hospitalario y amable. Es una persona brillante y está impuesto por su fuerte personalidad, su rápida inteligencia, sus habilidades de habla y la velocidad de su comprensión y acción. Es entrañable e hiperactivo en todo lo que hace. Signficado de James

En el plano laboral, tiende a ser creativo y excelente para expresarse ante la gente, por lo que puede sentirse atraído por las artes. Disfruta de las carreras que lo ponen en el candelero y que le hacen ser el centro de atención. El problema es que suele involucrarse en muchas actividades diferentes y esto puede llevarle a ser imprudente con sus energías y con el dinero. Por otra parte, debe desarrollar la tolerancia y el sentido del trabajo, su tendencia es, con mayor frecuencia, el buscar la facilidad.

Brillante en la sociedad, le gusta ser el centro de atención y llega a ser muy exagerado, ya sea por diversión o para impresionar a su público. Sin embargo con sus amistades es muy fiel, no falla como amigo. Además, tiene una habilidad especial para trabar amistad con personas de lo más variadas y originales.

A pesar de su energía e impetuosidad, en el ámbito familiar sufre de una excesiva sensibilidad que le hace padecer con los problemas que afectan a aquellos que más quiere.

En el amor, James tiene un poco de oportunista, tiene el arte de encantar y seducir y demuestra ser una persona muy adaptable, monopolizando así la atención de su amada persona. Aun así, es un hombre bastante fiel, con un profundo deseo por formar una familia estable. James es muy sensible a la adulación, llegando incluso a ser un poco narcisista, por lo que no se debe cultivar en exceso su narcisismo para que no caiga en la prepotencia.