Significado de justicia

El significado de justicia puede ser algo difícil de definir, ya que en ocasiones es complicado saber que es o no justo. Todo depende de los valores que implementen en una sociedad, así como de las creencias y convicciones que cada persona tiene de forma individual.

Definición de justicia

Hace referencia a una virtud cardinal, esta supone la inclinación a otorgarle a cada persona lo que le pertenece o lo que le concierne, a menudo se entiende como lo que se debe hacer de acuerdo con lo considerado razonable, equitativo o indicado según los derechos impuestos por la sociedad.

La definición de justicia depende de la interpretación que le de cada sociedad, la cual crea y modifica sus propias leyes jurídicas según lo consideren necesario a lo largo del tiempo. Se trata principalmente de un bien común a la humanidad, el cual surgió como consecuencia de necesitar mantener y garantizar que perdure la armonía entre las comunidades.

Puede decirse entonces, que responde a una serie de normas, las cuales pueden ser implícitas o explicitas, y que se encargan de regular la vida en sociedad, determinando cuales son las cosas que se pueden hacer y cuáles no, en cuanto a las relaciones entre diferentes individuos y también entre estos y las instituciones.

Fundamentos de la justicia

La justicia se tiene dos fundamentos básicos, el cultural que consiste principalmente en tener en cuenta que toda la sociedad es manejada por su propio sistema de valores, es decir, que cada una de las comunidades se opera bajo un conjunto de normas morales que mantienen la vida en orden y son ampliamente conocidas.

Por otro lado se encuentra el fundamento formal, que se considera el modo en que usualmente se piensa sobre este concepto. Esto se refiere al aparato jurídico que está compuesto por documentos escritos, que se encargan de establecer los delitos y cuáles son las penas correspondientes a los mismos.

Estos fundamentos son estudiados por los profesionales del derecho, que a su vez son quienes las ejecutan. Estas personas poseen la particularidad de garantizarles a los demás una imparcialidad total mientras se esté resolviendo el conflicto, que pueden incluir tanto a empresas como a individuos.

Desde un punto de vista más bien filosófico se le define como una virtud cardinal, que habita en la voluntad de los individuos, mediante la cual estos se ven inclinados a dar cada uno lo que le corresponde, ya sea de forma individual, en sociedad o como grupos de personas miembros de una.