Significado de resiliencia

El significado de resiliencia proviene del verbo que deriva del latín “resilio”, que significa volver para atrás y rebotar, con lo cual hace referencia a volver al estado de ánimo anterior o a un estado natural, especialmente cuando se ha pasado por una situación crítica o inusual.

Definición de resiliencia

La resiliencia es la capacidad que tenemos los seres humanos al afrontar las adversidades, saliendo victoriosos ante situaciones difíciles, sobreponiéndonos así a los dolores emocionales y traumas.

Por medio de la resiliencia el individuo tiene la capacidad de desarrollar al máximo su potencial. Para una persona resiliente no existe una vida dura, sino instantes difíciles logrando tener la conciencia  para dominar los obstáculos que su camino le depara.

Te preguntaras ¿Puedo ser una persona resiliente? Afortunadamente la resiliencia no es una cualidad innata, por lo que podemos desarrollarla siempre y cuando tengamos la capacidad de renovar nuestros hábitos y creencias.

Te invito a seguir leyendo este interesante post, donde encontraras algunas características para desarrollar nuestra resiliencia.

Características de un individuo resiliente

Estas son las características que definen a una persona resiliente:

• Conoce sus debilidades y fortalezas: el autoconocimiento limita al individuo, pues sabe hasta dónde puede llegar, de esta manera trazan metas y sueños aprovechando al máximo todos los recursos que disponen para aplicarlos.
• Son objetivos y optimistas: conocen sus prioridades, usan todos los recursos que tengan a su alcance para lograr así cumplir sus metas, se centran en buscar todo lo positivo de una situación y gozan de enfrentar retos, tienen la capacidad de estar radiantes por lo que saben que luego de la tormenta viene la calma.
• Las dificultades las convierten en aprendizajes: asumen las crisis como una oportunidad para generar un cambio a favor, están claros de que esas dificultades no van a estar allí para siempre y que su futuro dependerá de su buena capacidad para reaccionar.
• Confían en sus capacidades: conocen sus habilidades y defectos, saben lo que son o no capaz de hacer, reconocen los límites y la importancia de buscar ayuda o trabajar en equipos.
• Forman lazos o buscan caminos con personas que tienden a ser positivas: saben escoger sus amistades y evitan individuos con malas vibras.
• Flexibles ante los cambios: adaptan sus planes y cambian sus metas cuando sea necesario.
• Son plenamente conscientes: son creativos, son capaces de transformar lo malo en lo bueno, no se angustian al no poder controlar todas las situaciones un aspecto muy importante por lo que es muy difícil tener todo bajo control.
• Buen sentido del humor: sonreír es parte de naturaleza.
• Son perseverantes: no renuncian a sus metas.